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Hoy vamos a hablar de un corte de carne delicioso y que es ideal para hacer bien cocido porque no pierde suavidad ni jugo.
Se trata del Short Rib, también conocido en otras latitudes como “Marmoleo Abundante” o «Asado de tira» porque proviene de la costilla de la res, es alargado y con pequeños huesos intermedios.
Básicamente, se obtiene de las primeras cinco costillas de la res, la parte más carnosa del costillar que llamamos pecho.
La experiencia de comer un Short Rib
Para los amantes de la carne, comer un Short Rib puede ser una experiencia cercana al clímax: el sabor intenso a res y una textura tan suave que no requiere cuchillo.
Si bien, se puede preparar en el asador, es una pieza que se disfruta más cuando recibió una cocción lenta. Aunque nadie se le negaría a una buena parrillada. ¿Verdad?
Además, es una pieza muy práctica pues se puede preparar de mil maneras: a la plancha acompañado de papas y ensalada, en estofado, a las hierbas, a la cerveza, glaseado con vino tinto…
¿Por qué sabe tan rico?
El secreto de un corte Short Rib radica en el “marmoleo”, es decir, la grasa intramuscular. Entre más tenga, más jugoso y sabroso será el corte.
¿Cómo identificamos el marmoleo? Por las vetas blancas que traen las carnes entre sus músculos. Es la grasa natural del animal, y dependerá de la alimentación que recibió la res, su raza y forma de crianza.
Por eso, hoy le invitamos a salirse de los cortes y platillos más tradicionales y experimentar con un exuberante Short Rib. ¡Contáctenos!
¿Y el maridaje? Este tipo de corte siempre debe ir acompañado de un buen tinto. Quizás un Cabernet Sauvignon, un Malbec o incluso un Pinot Noir ligero, con poca madera y un toque amargosito. Esas mezclas le dan color e intensidad a la vida.
